Juan Carlos Algañaraz MADRID CORRESPONSAL
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El ex presidente de gobierno español José María Aznar, lanzó ayer un ataque de insólita dureza contra José Luis Rodríguez Zapatero señalando que "ha conseguido que media España no acepte a la otra media. Eso condujo a lo peor de la historia española hace 70 años". Aznar aludía al enfrentamiento entre las "Dos Españas" y a la guerra civil que las enfrentó entre 1936 y 1939.
La escalada de crispación entre derecha e izquierda, las "Dos Españas", nunca había llegado tan lejos. El discurso de Aznar se produjo en el marco de la campaña electoral para los comicios autonómicos y municipales que se realizarán el domingo.
Los resultados de la consulta tendrán una importancia histórica porque en los meses siguientes hasta marzo del año que viene, se deben realizar elecciones parlamentarias de las que saldrá el nuevo gobierno de España.
"Nunca un cambio de gobierno ha sido tan urgente y necesario por haberse puesto en cuestión los pactos de la Transición, el modelo territorial y haberse destruido la política antiterrorista". Añadió que "no puede seguir gobernando un señor (se refería a Zapatero) que no sabe si existe la 'nación española'".
El ex líder de los conservadores, advirtió que en los comicios del domingo "cada voto que no vaya al Partido Popular será un voto para que ETA esté en las instituciones".
En referencia al debate sobre la dictadura franquista y la búsqueda de sepulturas clandestinas de desaparecidos asesinados por el régimen de Francisco Franco, Aznar señaló que "España no necesita mirar atrás, remover huesos ni mirar al pasado".
Estas afirmaciones tuvieron gran repercusión. Rodríguez Zapatero declaró que "hay que responder a los insultos y las insidias de Aznar votando masivamente por la convivencia y no por la crispación. La mayoría de los españoles vivimos muy a gusto conviviendo juntos y juntos hemos luchado y lucharemos para poner fin a la violencia".
El actual líder de los populares, Mariano Rajoy, señaló que "dentro de unos meses se cambiará la política antiterrorista y se cambiará con otro Partido Socialista distinto del que hay ahora". Explicó que "el socialismo ha sido derrotado por la realidad. El nacionalismo es incompatible con el mundo en que vivimos".
Varias fuerzas políticas pidieron a Rajoy que condenara las palabras de Aznar. Felipe González calificó de "monstruosidad" sus afirmaciones en el sentido de que cada voto que no vaya al PP servirá para consolidar la presencia de ETA en las instituciones. "Han sido declaraciones absolutamente impropias", señaló Gonzáles. Izquierda Unida tildó a Aznar de comportarse como un "mentecato salvapatrias" y lo acusó de hacer una campaña "neofranquista".
En las elecciones del domingo se elegirán los representantes en 8.111 municipios. Las urnas también designarán a las autoridades de 13 de las 17 comunidades autónomas. No se esperan cambios en general aunque sí podrían registrarse victorias de la izquierda en Navarra y Baleares ahora en manos del PP. También se augura que los socialistas se conviertan en la primera fuerza electoral en Canarias.
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